Desde Garma Proyectos nos encargamos de la reforma integral del edificio, desde la redistribución de espacios hasta las instalaciones, acabados y detalles finales. El trabajo incluyó la transformación de los locales comerciales de planta baja en viviendas, respetando la normativa vigente y optimizando al máximo la luz, los accesos y la ventilación.
Se trabajó con una estética limpia y contemporánea: suelos de madera, cocinas integradas con cristal y metal, baños funcionales y un diseño general que mejora no solo el interior, sino también el valor del conjunto. Todo el proceso se hizo con agilidad, cuidando los tiempos y las decisiones técnicas para que el resultado fuera realista, duradero y rentable.
Un proyecto bien aprovechado. Y sobre todo, bien pensado.